Calendario Deportivo

jueves, 1 de septiembre de 2011

FEDC-Cervera Pisuerga_3ª Carrera 2010

Tercera carrera que organiza la FEDC, y en esta ocasión ha sido en Cervera de Pisuerga ( Palencia ).

Desde esta carrera Emilio comenzo a tener una forma fisica y fruto de su constancia y esfuerzo fue acumulando trofeos y premios.

Os dejo con el video de esta carrera.


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Carta Abierta - 4º Acogimiento

CARTA ABIERTA

Donde estarás en estos momentos. La casa está vacía sin tus risas, sin tu vida, sin tus ojos, sin tus idas y venidas, pero sólo esperamos que seas feliz. Donde estarás ??

Todos te extrañamos y no sabemos donde encontrarte. Me fui a buscar tu sonrisa entre el susurro del viento, pero fue inútil: tu sonrisa es más poderosa. Intente encontrar tus ojos en el resplandor del sol, pero tampoco lo logre: tus ojos me cegaban, pero aún así no desistí y seguí buscando entre los árboles tus ganas de vivir, sin apenas encontrar rasgos de su fuerza. Tu coraje tampoco se encontraba entre los truenos de la tormenta ni tus besos entre las flores.

Entonces donde te podía encontrar ¿?.
Pasaron los días y no te hallé. Con mucho miedo pensé que te habíamos olvidado, pero todos te llorábamos escondidos con nuestros miedos. Seguíamos mirando hacia un lado y otro para encontrarte, pero todo fue un esfuerzo vano. Aún así nos encontrábamos dichosos de saber que aún te sentíamos como nuestro. En cada momento pedimos a Dios que te cuidara.
Cada día te recordamos como si no te hubieras ido de nuestro lado, pero nada será como antes. La casa sigue encontrándose vacía y no sabemos como rellenar ese espacio tan grande que ocupabas, pero ten la seguridad de que no te olvidaremos nunca.

Te acuerdas ? Que inquietud por descubrir por ti mismo todas las cosas que te rodeaban. Tu sentido de la libertad lo llevas muy dentro de ti y por eso quise descubrirte entre el viento, el sol, los árboles, la tormenta, las flores. Todo fue inútil.

Aún así te seguimos llorando.

Volví triste porque no te pude encontrar y no supe a ciencia cierta si te había olvidado, pero cuando entre en casa todo cambio. Sentí como jugabas con el coche, con la bici, como nos llamabas, como te despreocupabas de todo para estar junto a nosotros, como nos colmabas con tus besos y abrazos. Tu ropa, tus juguetes seguían en el mismo sitio, pero estaban inmóviles como cadáveres, sin vida, sin fuego y la vida nos dio un vuelco.

Fui a encontrarte entre el viento, el sol, la tormenta y las flores y no te encontré. Volví triste. Todo fue inútil, ignorante de mí, y no supe verlo antes.

Te busque fuera de nosotros y Dios te había puesto en nuestras vidas, de dónde nunca vas a salir. Cuando queramos buscarte sólo miraremos hacia dentro y allí estarás con tus brazos extendidos hacia nosotros, con tu fuerza, con tu coraje por vivir, con la fuerza de tu sonrisa, y sólo así sabremos que sigues siendo feliz.

Guardaremos todas tus cosas, pero siempre, siempre nos acompañaras y el viento nos dará fe de tu sonrisa, el sol de la grandeza de tus ojos, los árboles tus ganas de vivir, la tormenta de tu coraje, las flores de la suavidad de tus besos. Pero algo se nos ha revelado: no hará falta encontrarte ni buscarte. Estás junto a nosotros.

Os queremos

Emociones acogimiento

Hoy no voy a hablar de la alegría que nos supuso leer por primera vez en un periódico la posibilidad de acoger un niño. Ni de la alegría cuando te comunican que hemos sido idóneos, ni tampoco de la emoción cuando ves a toda tu familia coger entre sus cálidos brazos y temblorosas manos el frágil cuerpecito, y por supuesto tampoco de la grandeza del mundo cuando te coge por el pulgar mientras juega ó se alimenta.

No, hoy no voy a hablar de felicidad, ni tampoco de alegría. Hoy voy a hablar de otras cosas.

Tampoco voy a hablar de la tristeza cuando te anuncian que ya han encontrado una familia. Aunque también.

Ni tampoco cuando lo bañás por última vez. Aunque también.

 Ni de las lágrimas que derramas cuando por última vez lo ves irse tras la esquina, ese momento donde el gira la cabeza instintivamente en tu busca y te dirige esa última sonrisa, esa sonrisa que hunde el mundo y nos avergueza de nuestras vanidades, de nuestras miserias. Aunque también.

Hoy no voy a hablar de nuestra tristeza y de la impotencia para ayudarle en su caminar, de no estar junto a él cuando se enfrente al mundo, a su propia historia. Aunque también.

 A toda costa queremos protegerlos, acurrucarlos en nuestros brazos cuando lloran, cuando sufren, darle calor para que puedan superar sus miedos.

Pero hoy nos encontramos aquí, temerosos, tristes, dichosos, que no felices, buscando entre nuestras manos un apoyo para superar esos momentos. Dificilmente lo encontraremos. Cada uno se enfrenta en la oscuridad de la noche, entre sollozos y lágrimas, frío y amargura, al injusto mundo que nos rodea. Cuánta miseria, cuánta tristeza ( ahora si hablo de ella ) sentirse impotente ante todas estas desgracias.

Y desde nuestra humildad os digo que gracias a esos sollozos hemos intentado dar vida a otras vidas. Cada uno a su manera, pero con lo mejor que somos, aunque ese camino es duro, diría que muy duro, porque nos va deslumbrando el castillo de arena de nuestra propia existencia. Sin amor no hay nada. Sin llanto no apreciamos el dolor ajeno.

Cuando uno no ayuda a los demas, no porque no pueda sino porque no quiera, mas vale morirse, porque no encontrara jamas felicidad que suplante esa ocasion de realizarse como persona.

Pero hoy no voy a hablar de tristeza. Hoy voy a hablar de la triste sonrisa del niño que está llorando, de su mano fría que te busca en la oscuridad de la noche, de esa sonrisa sincera y abierta que han dejado en nuestros maltrechos y rotos corazones, de su olor por todos los rincones de la casa.

Me confieso ante todos como un hombre incompleto, muchas veces vacio, pero me siento afortunado por tener junto a mi a toda mi familia. Sin ellas no soy nadie y desde aquí quiero decirles que LAS QUIERO, y  quiero decirselo todos los dias. Gracias a vosotras he cambiado mi forma de entender el mundo, la vida y he llegado a comprender que con el orgullo y rencores no hay sitio para amar. Prefiero amar y decir OS QUIERO.
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