A las 6h. el hospitalero del albergue de Lugo encinde las luces, y aunque Antonio habia manifestado su disconformidad por acostarnos el día anteior tan temprano ( sobre las 22h), al final lo agradeció, pues nos confesó que ha dormido de un tirón, a pesar de los ronquidos. Iniciamos nuestra marcha sobre las 8h. , dirigiendonos hacia la Catedral de Lugo, y después de unas fotos salimos por la Porta Miña, la más antigüa de la muralla, hacia el barrio de San Lázaro, donde a 3 Km. del Camino se puede visitar el templo de Santalla de Boveda (declarada Monumento Nacional). El Camino hacia San Roman de Retorta es prácticamente por carretera secundarias, tranquilas y bonitas. A la llegada a San Roman de Retorta nos encontramos con la Iglesia Románica del Siglo XII, donde parmos un momento y realizamos unas fotos.
Justo en este punto podemos optar por varias direcciones, decidiendonos por la que transcurr por la Calzada Romana, señalizada por un miliario y muy bien señalizado. Siguiendo esta ruta pasamos por Santa Cruz de Retorta donde podremos admirar un crismón de los llamads Trinitarios. Al llegar a "Hospital", tambien conocido como O Francés hay una perdida momentánea, donde Antonio se dirgió hacia una bajada, que después tuvimos que recuperar, si bien Jose Bellido, se quedó al inicio de la misma, ahorrándose una energía que despuésle vendría bien. Parada técnica para desayunar en una aldea y que bien nos atendio la señora, toda amabilidad y cor
tesía. Ya en este punto nos vamos encontrando con muchos peregrinos. Pasamos por Xende, Augas Santas, Merlán, Vilouriz y Vilamor, donde en un momento dado vimos a lo lejos Melide y cualquiera desviaba al "Profe" por los caminos, siguiendo por ruta bien marcada por carretera que le indicaba su GPS. Llegada a Melide donde decidimos buscar un Hostal ante la situación del albergue, que no estaba precisamente en su mejor momento. Nos duchamos, y nos bajamos a comer al restaurante. Despues de comer decido darme una vuelta por Melide, visitando el Museo y su conjunto histórico ( Cruceiro de Melide, el más antiguo), la Capilla de San Roque, la Iglesia de Santa Maria de Leboreiro y el Museo. Por la tarde, despues de escuchar Misa, nos reunimos, cenamos pulgo en Casa Ezequiel y posteriormente un pequeño refresco en un Pub, donde escuchamos la canción "Retales de una Vida" 
y decidimos convertirla en la canción de nuestro Camino.
Salimos de Grandas de Salime, muy temprano y con mucha niebla "llorona", que obligó a extremar las precauciones ante los coches que nos encontrabamos, pues casi todo el recorrido lo realizamos por carretera, excepto los últimos 27 Km. que realizamos por c
aminos bonitos. Iniciamos la subida por la As-28 al puerto del Acebo, donde en un dia lluvioso pudimos realizar unas estupendas fotos, ya reflejando el esfuerzo realizado. Continuamos nuestro Camino, y restan aproximdamente 180 Km para llegar a Santiago, por la As-28, que entra y sale continuamente del Camino. Alcanzamos Fonfría, donde se ubicó un hospital de peregrinos, continuando hacia Fonsagrada, donde paramos a desayunar, en un día que continuó siendo lluvioso. Despues de repostar, y con el sol saliendo, iniciamos nuestra ruta hacia Montouto, donde existen restos de un antigüo hospital y muy cerca de allí restos de un dolmen. Desde alli continuamos hasta Paradavella, preciosa localidad que conserva las antiguas casas campesinas, denominadas "pallozas", descendiendo postriormente hasta Cadavo (capital del municipio de Baleira), continuando hacia Vilabade, donde podemos apreciar el convento de San Francisco de Vilabade, declarado Monumento Nacional. Ya muy cerca se encuentra CastroVerde, que nos la encontramos de fiestas, paramos a repostar en un excelente ambiente. Iniciamos nuestra marcha con las pilas puestas, encontrándonos a la salida a un peregrino vasco, donde Antonio continuó sin percatarse de nuestra parada y de nuevo llamadas para podernos localizar. El Caminon transcurre entre Caminos hasta Lugo, donde entramos por la muralla y buscamos el albergue, no sin antes busca un cajero para el "Profe", cuyo hospitalero nos hace esperar aproximadamente 1/2 hora hasta comprobar que no llegaron más pergrinos a pie. Nos duchamos, visitamosLugo, su Catedral, voy a Misa y despues nos reencontramos todos para ir a cenar, recordándole a Antonio que el hospitalero nos había comentado que a las 22h. debíamos estar dentro, y aunque no le hizo mucha gracia acabamos la cena rápida, esta vez sin copa, para apresurarnos antes del cierre del albergue. Día completo, hermoso y armonía.
Iniciamos temprano nuestra ruta por carretera, abandonando por un mome
nto el Camino original, hasta Obona, donde bajamos a observar el Monasterio de Obona, en muy mal estado, y despues de unas instantaneas continuamos, decidiendo continuar por carretera, que nos obliga a dar un importante rodeo a nuestra ruta, aunque hay que destacar la belleza de las aldeas y lugares por donde pasábamos, destacando para mi la población de Bárcenas del Rio, donde pudimos contemplar el Monasterio de San Miguel. 
Continuamos camino por las aldeas de Tablado del Rio, La Bidana y alcanzamos Borres, donde paramos un momento para continuar acto seguid hacia La Mortera, donde nos paramos a desayunar en una casa-bar, 
donde decidimos continuar por la Ruta de los Hospitales, la ruta más antigua y que durante 20/25 Km. se recorren lugares inhospitos, donde no existe ninguna posibilidad de repostar, y que nunca parecia acabar las cotas que ascendiamos donde tan solo la presencia de caballos semi salvajes nos acompañaban en el camino, pasando por los antiguos hospitales, hoy casi derribados ( Hospital Fonfaraon). Alcanzando la cota del Puerto del Palo el "Profe" dijo que por hoy los caminos se habian acabado, lanzandonos en continua bajada por carretera, pasando por las aldeas de Montefurado, La Mesa, donde despues de tomar un refreso y bocata, iniciamos el camino hacia Grandas de Salime, que se alcanza despues de 6 Km. en subida desde la presa del mismo nombre. El refugio no es aconsejable ( una sola habitación con dos ó tres literas - no recuerdo bien- de tres camas cada una y una higiene dudosa), razón por la que buscamos un hostal que tampoco estaba bien del todo, pero siempre mejor que el albergue. Nos duchamos y visitamos la Colegiata ( Catedral sin obispo, según me indicó el "Profe") y después de cenar nos acostamos. Nuevo día sin incidentes y xcelente ambiente.
El Camino de Oviedo a Tineo se ha realizado fiel a la ruta que teniamos prevista. Nos levantamos en un día lluvioso y gris sobre las 6h, quizas por los nervios, comenzando a preparar todo nuestro arsenal (alforjas, bolsas, casco,....), comenzando a pedalear sobre las 7,30h, junto al italiano que conocimos el día aterior, parándonos en la Plaza de la Catedral de Oviedo, donde realizamos las primeras fotos. Conseguimos orientarnos por las flechs que hay en el suelo, si bien en un cambio de acera nos perdimos, que nos obligo a preguntar. Una vez conseguimos encontrar de nuevo el rumbo subimos a una urbanización y tras una pequeña bajada nos adentramos en una senda, muy verde ella, en continua ascensión. Pasamos estas primeras cuestas con la ilusión de un niño y con la incertidumbre de saber si llegariamos sin incidentes, entre sendas llenas de historia y de
una gran belleza. La lluvia empieza a apretar y nos acompaña hasta Grado, donde decidimos parar a desayunar y descansar un poco. En el bar de la entrada comenzamos a hablar sobre lo que nos quedaba y más de uno del lugar se echaban a reir que al preguntarle el motivo nos indicaron que menudos puertos nos esperaban, pero nosotros no desesperamos. Nos montamos de nuevo en la bici y continuamos nuestro Camino. Pasado Grado pasamos un primer puerto (Alto del Fresno) y en este punto tanto Antonio como yo decidimos ir a ver el Templo de Nuestra Señora de Fresno. 
Un templo sobrio, pequeño pero dentro se reinaba paz. Despues de estos 5 Km. extras de nuevo iniciamos el Camino todos juntos, ahora entre caminos frondosos, vegetación, árboles, etc.... y asi hasta llegar a Cornellana, donde paramos a ver el Monasterio de San Salvador. Ahora por carretera llegamos a Casazorrina y antes de llegar a este pueblo el primer susto del día. El teléfono móvil se me habia extraviado, así que aparco la bici en el anden y junto a la carretera busco un par de ves, hata que por fin lo encuentro. Los demas me estaban esperando, con cierta preocupación, un poco más arriba. Dsde este punto a Salas nos quedan tan solo 6 Km. donde paramos a comer y contemplar su conjunto histórico, de época medieval. Una vez acabamos iniciamos el puerto de Porciles, una dura prueba con el estómago lleno y ahí el "Profe", con su agudeza, llamó a Antonio, que lógicamente iba por delante de nosotros, por el móvil un par de veces, y cuando este se paró a atender el móvil y comprobó que era Esteban, se echo a reir y a maldecirlo, pues una vez se paró todos los alcanzamos y adelantamos. Así, con un excelente ambiente llegamos a Tineo, donde el hospitalero nos indicó que hasta las 18h no podiamos entrar al albergue, en previsión de aquelllos que venian andando. Llegada la hora sellamos credencial y nos acomodamos. Ducha, visita al pueblo y una excelente cena. La primera etapa había transcurrido sin incidentes.
Por la tarde comenzamos a preparar todo el equipaje, bicicletas, etc... ,y a las 18h. comenzamos a cargarlas en la furgoneta que habiamos alquilado a tal efecto. No obstante sobre las 15h. recibo la llamada de Manuel Caro "Tijeras", indicándome que quería venir y que luego me llamaria para confirmarmelo, pero que no dijera nada porque realmente no estaba seguro si al final iba a poder venir. Pasadas las 20h. lo llamo y le pregunto si se ha decidido, a lo que me contestó que todavía no lo tenía claro y que esperaba llamarme más tarde. A esto nosotros continuamos con nuestros preparativos y a eso de las 21h. habiamos quedado los 4 peregrinos ( Jose Bellido, Esteban "El Profe", Antonio Ramirez y yo) para tomarnos una cerveza con los amigos, a esto que sobre las 23h. nos llama el Tijeras diciendonos que venía y sobre que hora ibamos a salir. Yo le informo y ahí surge nuestra primera diferencia, pues algunos no creían que cogiera la bici y que no era de recibo que llamara a estas horas para decirnos que venía cuando meses atrás nunca había manifestao su intención de no venir. En ese preciso instante se le llama por teléfono y se le dice que no puede venir, con el consiguiente enfado por parte de todos. Pasado este trance, que me entristece, sobre las 5h. pasa a recogerme Antonio, a continuación a Jose Bellido y posteriormente a Esteban, y las primeras horas de viaje transcurren comentando el incidente de la noche anterior. Atravesamos Caceres y paramos a desayunar donde se produce el relevo de chófer hasta cerca de Valladolid. El ambiente se va suavizando, pero no dejo de darle vueltas al asunto. Llegamos sin problemas a Oviedo, y lo primero que hacemos es visitar la ciudad, posteriormente buscar el refugio y a continuación almorzar. Nos aconsejaron un restaurante "El Tartuquin" donde se come muy bien y donde fuimos haciend grupo. 
A la vuelta al albergue comenzamos a preparar las bicis y conocemos a un italiano. Por la noche me quedo en albergue descansando y meditando mientras que el resto del grupo se va a la ciudad a dar un paseo. Comenzaba a llover.
